" El designio de ser felices que nos impone el principio del placer es irrealizable; mas no por ello se debe –ni se puede- abandonar los esfuerzos por acercarse de cualquier modo a su realización. Al efecto podemos adoptar muy distintos caminos, anteponiendo ya el aspecto positivo de dicho fin –la obtención del placer-, ya su aspecto negativo –la evitación del dolor-. Pero ninguno de estos recursos nos permitirá alcanzar cuanto anhelamos. La felicidad, considerada en el sentido limitado, cuya realización parece posible, es meramente un problema de la economía libidinal de cada individuo. Ninguna regla al respecto vale para todos; cada uno debe buscar por sí mismo la manera en que pueda ser feliz. Su elección del camino a seguir será influida por los más diversos factores. Todo depende de la suma de satisfacción real que pueda esperar del mundo exterior y de la medida en que se incline a independizarse de éste; por fin, también de la fuerza que se atribuya a sí mismo para modificarlo según sus deseos. "
Sigmund Freud - "El malestar en la cultura" (fragmento)
domingo, 21 de diciembre de 2008
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2 dale, decilo:
Aristóteles decía que la felicidad es el fin último del hombre. Por eso es la virtu perfecta.Y también decia que la virtud es un hábito... lo que quiere decir que se obtiene por la práctica.
Siempre me resultó al menos interesante eso...
waaa escucho al flacooo, me inspiré?
adió
virtud, no virtu...
la virtú es la de Maquiaveloooo me confundí!
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